Wendy and Lucy

                                                     Wendy and Lucy .

       Ya hacía tiempo que esta película me rondaba y es que ingredientes tales como Michelle Williams, haber competido en la sección oficial del 46 F.I.C.X.  y un aluvión de buenas críticas, hacían que se me presentase mas que apetecible.

     "Wendy and Lucy" es una atípica road movie de 2008 de la directora norteamericana de cine independiente Kelly Reichardt ("River of Grass", 1994; "Old Joy",2006).


     Wendy es una joven que viaja rumbo a Alaska, junto a su perra Lucy, en un viejo Onda Accord de los 80, en busca de trabajo y de una nueva vida mejor. Mientras cruzan el estado de Oregón, una avería del vehículo desencadena un aluvión de infortunios. El poco dinero con el que cuenta para el trayecto hace que Wendy se vea obligada a robar en un supermercado unas latas de comida para alimentar a su hambrienta perra. Un dependiente descubre el hurto y Wendy es llevada a comisaría, dejando a Lucy atada a la entrada de la tienda. Tras pagar una multa que asfixia su bolsillo aún mas si cabe, y pasar unas horas entre rejas, Wendy corre al encuentro de Lucy, pero ésta ya no estará allí. Así, se verá obligada a permanecer en la zona mientras inicia una incesante búsqueda de su fiel y única compañera de viaje, intenta solucionar la avería de su coche y luchar contra las adversidades. 



     Michelle Williams interpreta de forma brillante( porque es una actriz brillante, valga la redundancia) a Wendy Carrol. Un nombre, que no por casualidad, hace referencia a la amiga de Peter Pan y al autor de "Alicia en el país de las maravillas". Una desarraigada protagonista que nos muestra un episodio de su presente en el que lucha por superar las adversidades con una dignidad asombrosa y que pone de manifiesto la deshumanización de la sociedad de una América cruel que no se identifica para nada con la tierra soñada de las oportunidades. 

     Wally Danton interpreta a un oficial de seguridad, cuyo nombre no se nos revela,con el que Wendy entabla un curioso vínculo, siendo el único que se muestra compasivo y con vocación  altruista de ayudarla, animándola a continuar la búsqueda y a no perder la esperanza de que Lucy aparecerá.
   
    Will Patton es el mecánico al que acude para reparar su maltrecho Onda, el cual se muestra indiferente a a los problemas económicos de la  joven , al permanecer absorto en todo momento por las incesantes e intrascendentes llamadas que se producen en su teléfono.

   La película está basada en el relato corto "Train Choir" de John Raymond quien colabora en la elaboración del guión junto con la propia directora.
   Con un presupuesto de 200.000$ fué rodada en Portland a lo largo del mes de agosto de 2007 y fué presentada en el Festival De Cannes de 2008, donde cosechó magníficas críticas. Además ha sido galardonada con el premios a mejor película  y actriz por los Premios de la Asociación de Críticos de Toronto. Como curiosidad mencionar que Lucy, que se interpreta a si misma, recibió por unaminidad el Palm Dog de 2008, premios que destacan la labor de los animales en el mundo del cine.
  
    Una obra que cuenta de forma sencilla una historia sobre la pérdida y la búsqueda de un ser querido, donde sorprende un ritmo pausado y sereno, escaso en diálogos y  dramatismos al que tan  acostumbrados nos tienen en películas con temáticas como ésta. Y es que es ahí donde radica lo excepcional del film, en como la directora hace gala de el consabido "menos es mas" para sin exaltación alguna, mostrar el drama de un dueño que pierde a su perro, sin apelar a una lastimera sensiblería (mas propia de una cinta de"Lassie" como aquella en la que hubiese participado,por cierto, la misma actriz allá por 1994). Y es que Michelle Williams dota al personaje de una naturalidad y honestidad que traspasa la pantalla, y que mantiene al espectador en una angustia vital de una hora y veinte minutos, a la espera de que el animal aparezca.

    La cámara realiza un ejercicio de realismo visual con una correcta fotografía a cargo de Sam Levy quien retrata el periplo de Wendy  y con montaje a cargo de la propia directora.

     Como corresponde a una obra minimalista como esta, la banda sonora se compone de un escueto silbido que hace aparición al inicio y final de la película, obra del cantautor Will Oldham, y a los sonidos de la ciudad en la que trascurre la historia que describen y ensalzan la tristeza y austeridad con la que vive la protagonista.

    

   No apta para almas sensibles( como la mía), mas si cabe si poseen mascotas, pero desde luego una gran película que sin grandes pretensiones emocionará intensamente a quien se enfrenten a su visionado.

    Podemos encontrar editada en DVD por la revista Cahiers Du Cinema (actualmente "Cuadernos Caimán" en España) en V.O.S.E. .

                                                                    A nuestros siempre fieles Groucho y Dana.

                                                                             Carlota García Fernández.